sábado, 21 de febrero de 2015

¿CÓMO SE REPRODUCEN LOS PERROS?





El periodo de celo nos indica que la perra puede reproducirse y está físicamente preparada para ser madre. Este periodo dura entre 15 y 20 días y los síntomas son un aumento de la vulva y sangrado.

Una perra que está preparada para reproducirse lo hará notar ladeando su cola y exhibiendo su vulva. La hembra ovula en el segundo día de celo con el sangrado, por lo que ese será el mejor momento para cruzarse. 

Su primer celo se da cuando tiene entre seis y diez meses de edad, siendo el intervalo entre celo y celo de 6 meses. Pero los veterinarios recomiendan esperar al segundo sangrado pues todavía es demasiado joven y sus ovarios aún no han madurado.
 
Por lo tanto, su aparato reproductor funciona a pleno rendimiento en su segundo sangrado (alrededor del año o años y medio). La edad ideal para la primera reproducción son los 2 años de edad que es cuando ha dejado de crecer y para su última reproducción son los 5 años. Además, no es recomendable que la perra tenga más de 5 embarazos en su vida.

Como ya he objetado, una hembra perruna que está preparada para aparearse lo hará notar. Las hormonas olorosas caninas (llamadas feromonas) que expulsa con su orina son reclamos para los perros de su entorno.
El pene del macho se estimula con el olor de las hormonas y responde con la erección. Esta erección, sin embargo, no le garantiza el éxito. Lo normal es que necesite varios intentos antes de introducir su órgano sexual en la vagina.

Cuando el macho consigue montar a la hembra realiza sucesivos movimientos rítmicos con cada envestida. La base del pene se hincha y se engancha dentro del cuerpo de la hembra. La primera eyaculación no tardar en llegar, aunque este líquido de color claro suele ser estéril, sin espermatozoides. En este momento el macho se gira y los dos animales quedan en posición opuesta respecto al otro.

 

Los perros quedan unidos en sentidos opuestos durante más de una hora. El pene del macho marca el fin del estrecho vínculo cuando produce la segunda eyaculación cargada de espermatozoides que puede dejar preñada a la perra. Después cuando el glande se relaja, pierde grosor y los animales se separan.
Para asegurar que queda preñada, conviene repetir la monta. Lo idóneo es hacerlo a los dos días del primer encuentro.